29 de noviembre de 2012

Pausa obligada

En la vida uno hace apuestas, acepta correr riesgos, lo hacemos todo el tiempo cuando necesitamos tomar decisiones importantes. Y es así como en cada opción que tomamos podemos acertar o equivocarnos... eso último fue lo que a mí me ocurrió: laboralmente hablando aposté mis fichas en el lugar equivocado, ingenuamente creí en un acuerdo de palabra que no quedó plasmado en ningún documento, y finalmente quedé cesante el último día hábil de octubre.

Y partió noviembre... un viaje planificado con anticipación y 4 días disfrutando con algunos de mis mejores amigos en Mendoza, aprovechando ese super feriado con el que partió el mes, un dulce paréntesis que me hizo recordar que la vida es mucho más que pasar horas y horas trabajando frente a la pantalla de un computador, tan dulce como las cajas de alfajores artesanales que me traje de allá. Pero había que volver a la realidad, y ahí me vi nuevamente actualizando el currículum, postulando a avisos de trabajo, asistiendo a entrevistas, corriendo de un lado a otro... al final cambia la rutina, pero el mundo no se detiene, no son vacaciones como muchos creerían. Las fichas comienzan a moverse nuevamente.

Finalmente acabo de hacer otra apuesta, una oferta atractiva de trabajo y buenas perspectivas... ¿ganaré esta vez?

No hay comentarios.: